martes, 24 de mayo de 2016

Tengo una lava-secadora y...

... estoy contento.

Hoy me vais a permitir salirme un poco de la temática habitual del blog, y es que hace tiempo me prometí que si terminaba satisfecho con la compra de mi lava-secadora lo compartiría, ¿y por qué?, pues porque en su día me volví loco buscando opiniones y con cada nueva opinión tenía cada vez menos claro qué hacer.

Os pondré un poco al día:
Hasta hace unos meses yo tenía lavadora y secadora por separado, el tema es que donde las tenía puestas tenía que tener una encima de otra, y a la lavadora le tuve que cambiar el tubo del desagüe por uno más largo porque donde debería ir no podía poner la secadora encima. Todo bien hasta que un día la lavadora se estropeó, y no merecía la pena arreglarla, así que ya que me tocaba cambiarla había que decidir qué hacer, las opciones eran comprar una lavadora normal y cambiarle el tubo del desagüe pudiendo perder así la garantía, comprar una lavadora de carga superior y colocarla al lado de la secadora, o comprar una lavadora-secadora todo en uno y deshacerme también de la secadora (que por cierto, aún la tengo en el trastero, si alguien quiere una... xD).

El tema es que no me terminaba de decidir, la tercera opción me parecía la mejor, además la zona de la lavadora ganaba mucho así, pero la fama de que las lavadoras-secadoras ni lavaban bien, ni secaban bien, me atormentaba mucho, así que buscaba y buscaba por internet y sólo encontraba comentarios negativos, pocos positivos, y lo único que me hacía no desechar la opción era que un par de personas conocidas que la tenían me decían que a ellos les iba bien.

Aún así me dejé caer por varios comercios, y me dejé aconsejar por los dependientes, y hubo uno que me terminó de convencer, me dijo que los que criticaban el combo de lavadora y secadora era porque no tenían ni idea de usarla, y que no eran pocos los clientes que venían a quejarse y tenía que explicarles un detalle que yo también desconocía: La lavadora-secadora tiene unos kilos de carga diferentes para cada uso, es muy habitual por ejemplo una lavadora de 6 kg de carga, y en cambio sólo 3 ó 4 kilos de secado, y claro, pues pasa que mucha gente carga la lavadora hasta los topes, y luego pretenden que les seque la ropa sin reducir kilos.

En mi caso la secadora la usaba sólo para secar las sábanas (porque me da pereza colgarlas), y las toallas (porque salen muy esponjosas), así que me preocupaba el tema del peso, por lo que decidí arriesgarme y opté por una lava-secadora de 10 kilos de carga en lavado y 6 kilos en secado (la lavadora que tenía antes cargaba 6 kilos, y la secadora 8 kilos), y bueno, tras un tiempo donde he ido habituándome a las diferencias de programa, y donde he tenido que solucionar que la lavadora se me moviera ligeramente (tan fácil como ponerle unas patas antideslizantes), he de decir que estoy bastante contento con el resultado, la lava-secadora lava estupendamente, y seca bien.

Obviamente si se puede tener por separado, pues mejor que mejor, pero si no queréis tener dos cacharros pudiendo tener uno, o simplemente os falta espacio, creo que la opción de un todo en uno es muy recomendable, pero siempre teniendo en cuenta el tema de la carga de kilos que he comentado.


Y ahora os diré el motivo de haber creado esta entrada, y es que en este mundo muchas veces tendemos a dejar constancia siempre que podemos de nuestro descontento, haciendo el máximo ruido posible, pero pocas veces lo hacemos de algo con lo que sí estamos contentos, y por eso es mucho más fácil encontrar siempre opiniones negativas que no positivas, y yo quiero dejar aquí mi granito de arena.


Ho!

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