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lunes, 6 de junio de 2016

El tigre y la nieve

En 2005 el excéntrico Roberto Benigni estrenó 'El tigre y la nieve', una película romántica con tintes de drama, y la peculiar comedia de la que suele hacer gala el director italiano.

Attilio es un poeta y profesor universitario de poesía, los acontecimientos cotidianos apenas hacen mella en él: de noche sólo sueña con una mujer con la que se desea casar. El nombre de la mujer es Vittoria y, en la vida real, ella, qué pena, no quiere saber nada de él. De hecho, ella se exaspera con las constantes atenciones de este hombre incurablemente alegre que nunca cesa de declarar su imperecedero amor por ella. Attilio la sigue a todas partes, la vigila, le promete amor eterno y se lanza a sus pies. Pero cuanto más le presiona, ella más se resiste. Vittoria también forma parte del mundillo literario: en este momento se encuentra escribiendo la biografía del poeta iraquí más importante de la actualidad, que ha vivido durante años en París y que está preparando su regreso a su hogar en Bagdad. Con la guerra en ciernes, a él le gustaría estar entre su gente, y con él se va Vittoria, para escribir su biografía. Cuando Vittoria resulte gravemente herida en un bombardeo, Attilio no podrá más que atravesar miles de kilómetros contra viento y marea para estar junto a su amada e intentar salvarla.

La película está protagonizada por el propio Roberto Benigni, Nicoletta Braschi, y Jean Reno.


Uno de los principales problemas que tiene esta película es que la gente inevitablemente la compara con 'La vida es bella', lo que hace que salga mal parada. A mí en cambio me ha parecido una película con sus más y sus menos, pero bastante única, con sus propias singularidades.

A decir verdad, toda la parte inicial me ha parecido muy cargante y mal explicada, incluso tramposa. Y aunque divertido, el personaje de Attilio resulta perturbador con la obsesión que demuestra. Pero aún así, cuando ves todo lo que es capaz de hacer entiendes que hay algo más en esta historia, ese detalle que cuando se desvela (de forma bastante torpe, todo sea dicho) consigue darle a esta entrañable historia de amor todo el sentido que no tenía al principio.


No creo que sea una película muy destacable, incluso no tenía pensado comentarla, pero a medida que ha ido pasando el tiempo, creo que el final me ha ido dejando huella.


Ho!

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